17 November 2014
Entendiendo por solitarios, -“que se lleve una vida individual, sin necesidad de compartir el día a día con otra persona, como tradicionalmente se venía haciendo”-. Sin embargo, los resultados de estas encuestas están “contaminados” puesto, que el ser humano, es una persona social por naturaleza. Necesitamos socializarnos constantemente. De ahí, que en muchos casos, se haya sustituido la compañía de una pareja por la de un “animal de compañía”, bien sea un perro, un gato o un cerdo vietnamita.
¿Por qué ocurre esto?
Sencillamente, cada vez nos hemos convertido en seres más egoístas. Bien, porque la sociedad actual nos ha llevado a ello o bien, porque nuestras propias exigencias personales nos encauzan de una manera u otra a ser egoístas.
Una de las vías de escape que tenemos a ello, son los animales de compañía. Puesto que nos ofrecen mucho de lo que necesitamos sin pedir nada a cambio. Nos ofrecen cariño, compañía, lealtad…valores que los seres humanos estamos perdiendo poco a poco con esta vorágine de vida que llevamos. Tal es así, que en muchos casos, estamos con los animales durante siete meses seguidos, dándoles de comer, beber, sacándoles a pasear, vacunándoles y cuando llega el mes de vacaciones les abandonamos por el simple hecho de que ya no tienen cabida en nuestra vida ese mes.
Ante esto, ¿quién es el animal y quién la persona?
Cuántas veces hemos oído que un animal no se ha separado de su dueño durante un estado de enfermedad. ¿nosotros haríamos lo mismo por nuestro animal de compañía? ¿son estos comportamientos, los que nos han llevado a ser cada vez seres más solitarios?
Lector@s, vamos a cambiar. Vamos a apretar nuestro botón de STOP para todas aquellas conductas o pensamientos que queramos cambiar en nosotros mismos o incluso en nuestra sociedad.
Para ello, podemos empezar con unas pautas de actuación sencillas que se pueden hacer diariamente.
Simplemente, dediquémonos todos los días cinco minutos, a reflexionar y escribir en una hoja en blanco que ha ocurrido en nuestra jornada. Qué cosas, hechos o situaciones no nos han gustado y que sin embargo, si esas cosas, hechos o situaciones las hubiéramos analizado antes, hubiéramos actuado de forma diferente.
Sólo así, podremos poner punto y final a todo aquello que no queramos que esté a nuestro alrededor. Que sin tener grandes problemas, nos hacen ser personas grises. Sólo así, podremos decir STOP a las conductas y pensamientos que realmente no nos dejan crecer a nivel personal.