Como optimizar las bombillas de tu hogar para ahorrar más

Para que este invierno no debas gastarte una fortuna en la factura de la luz, puedes empezar a cambiar las bombillas que se fundan por unas más eficientes energéticamente. Con los 4 consejos que encontrarás a continuación puedes empezar a ahorrar más dinero todos los meses:

1. Escoge la tecnología adecuada

Para ahorrar en el hogar lo mejor es escoger las bombillas con la tecnología adecuada. La tecnología adecuada será aquella que consuma poco y nos dure mucho tiempo. Aquellos que hayan pensado en las bombillas de bajo consumo, no. No nos referimos a este tipo de bombillas por el simple hecho de son muy perjudiciales para nuestra salud y la de los nuestros. Esto es debido a que contienen gases contaminantes y otros elementos tóxicos como el Mercurio que si se inhala puede causar graves daños irreparables.

La tecnología más adecuada es la tecnología LED. Esta tecnología no solo consume hasta un 50% menos que las de bajo consumo y un 85% menos que la tecnología tradicional. Además, duran una media de cuatro veces más y están hechas de materiales reciclables. No contienen Mercurio y su precio ha descendido hasta un 80%. En la actualidad, se puede encontrar productos LED de fabricantes reconocidos como Philips que cuestan solo un par de euros más que las bombillas de bajo consumo.

2. Escoge los lúmenes necesarios

No por tener más luz es mejor. De hecho, existen lugares donde el flujo lumínico no se recomienda que sea elevado ya que son estancias destinadas para el descanso. Un ejemplo de estas habitaciones son los dormitorios. Si nuestro dormitorio tiene ventanas con luz natural una bombilla con bajo número de lúmenes sería suficiente. Cuantos más lúmenes produce una bombilla más cara será. Si necesitas una luz de refuerzo para leer entonces lo mejor es un foco o una luz para la mesa de noche.

3. Escoge luces regulables

No en todos los momentos necesitamos la misma cantidad de luz, dependiendo de la actividad que estemos realizando necesitaremos mayor o menos luminosidad. Adquiriendo luces regulables podremos ajustar esta intensidad y nuestro consumo será menor.

4. Intenta eliminar complementos innecesarios

Algunas bombillas necesitan el uso de transformadores. Del mismo modo, los tubos fluorescentes necesitan de un cebador y de un balastro. Los tubos LED, por ejemplo, como tiene un voltaje como nuestra corriente eléctrica de 220-240 Voltios no se necesitan este tipo de aparatos externos que aumentan nuestro consumo de energía. Así pues, en la medida de lo posible intenta deshacerte de estos aparatos.