El 8% de los alumnos extremeños sufre algún tipo de acoso en colegio

Además aumentan los casos de violencia de género entre adolescentes, según los datos que maneja la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura

15 November 2017

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Ocho de cada cien alumnos de los centros educativos extremeños sufre algún tipo de acoso escolar (bullying) por parte de sus compañeros y, además, aumentan también los casos de violencia de género entre adolescentes, según los datos que maneja la Asociación de Derechos Humanos de Extremadura (Adhex), que ha organizado en Cáceres una jornada para prevenir estas conductas violentas en esas edades tempranas.

Según ha explicado la presidenta de Adhex, Flor Fondón, cada vez hay más casos de violencia de género entre parejas de adolescentes en las que el chico "empieza a controlar el móvil, la ropa o las amistades" y las chicas consideran que "todo eso forma parte de la relación normal de pareja" y que "los celos son una muestra de amor", por lo que es "fundamental" trabajar desde la prevención y la educación para que no ocurran estos casos y se detecten a tiempo.

Según un informe del centro Reina Sofía, el 27 por ciento de la población joven opina que la violencia de género "es una cuestión politizada" y que "es normal" que se dé en el ámbito de la pareja, lo que resulta "muy preocupante" para las asociaciones y profesionales que trabajan en este ámbito.

Pero en estas jornadas sobre buenas prácticas para prevenir conductas violentas de los jóvenes y hacia los jóvenes, que se celebran en la Facultad de Formación del Profesorado del campus universitario cacereño, se abordan también otros temas como los malos tratos en el ámbito familiar, entre ellos el abuso sexual.

Según los datos ofrecidos por Fondón en un encuentro con los medios antes de comenzar las jornadas, en 2015 hubo en Extremadura un total de 123 casos de malos tratos físicos a jóvenes en el ámbito familiar.

Esta cifra en España es "alarmante" para la presidenta de Adhex, ya que en el territorio nacional se producen unos 37 casos diarios de abusos a menores en el ámbito familiar y, en el caso de abusos sexuales que principalmente lo llevan a cabo personas cercanas, el 23 por ciento de las niñas están siendo abusadas sexualmente y un 15 por ciento de los niños también sufren esta lacra.

Solo el dos por ciento de los casos se detectan en el momento que ocurre y se puede intervenir, pero la mayoría se descubre cuando el niño ya es adulto porque las víctimas mantienen el "silencio" ya que dependen emocionalmente de su agresor y, en muchos casos, "no hablan y arrastran sus secuelas de por vida". "Quienes deben querer y proteger a los menores son los que abusan de ellos", se lamenta Fondón, que ha explicado que la solución "está en la educación y la prevención".

"Todas estas cuestiones queremos abordar desde el punto de vista de la prevención y las buenas prácticas con organizaciones y entidades que están trabajando en ese sentido", ha concluido.

TELÉFONO ANAR

En las jornadas ha intervenido la subdirectora del teléfono de la asociación de Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo (ANAR), Mónica Pasquín, que desde el número 917 26 27 00 lleva casi cincuenta años prestando servicio en todo el país con profesionales que ayudan a los jóvenes que sufren algún tipo de violencia u otro problema.

Pasquín ha centrado su intervención en la importancia de la detección de casos de abusos en menores y ha pedido la colaboración de los ciudadanos y los profesionales de diferentes ámbitos como el educativo, sanitario, policial o judicial, porque es "vital" su apoyo, ya que los menores están "muy indefensos" y necesitan de la colaboración de "todos" cuando sufren un maltrato en el ámbito familiar.

Según ha indicado Pasquín en el Teléfono ANAR se reciben más de mil llamadas al año desde Extremadura y el trabajo de los psicólogos que atienden las llamadas reside en que "el adolescente o el niño se sienta acogido, escuchado y entendido".

EXPERIENCIA DEL COLEGIO PAIDEUTERION

En las jornadas también ha participado el jefe de estudios el colegio Paideuterion de Cáceres, Diego Boticario, que ha relatado la experiencia educativa que se desarrolla en su centro desde el curso 2004/2005 para prevenir los casos de violencia en las aulas y mejorar la convivencia.

En este colegio se realizan tertulias pedagógicas, se trabaja en grupos interactivos, o se forman comisiones mixtas de aprendizaje en un proyecto educativo avalado por la comunidad científica internacional. "Entre docentes y chicos se establece un diálogo de igual a igual y se trabaja entre todos fijando unos objetivos comunes de manera que se mejore la convivencia y también los resultados académicos", ha explicado Boticario.

"Es una filosofía que tiene que impregnar en la comunidad educativa", ha añadido el jefe de estudios, que asegura que "está demostrado" que desde que se puso en marcha el proyecto en su centro el número de casos de problemas graves de conducta ha disminuido "en un porcentaje altísimo" al tiempo que ha mejorado el aprendizaje de los chicos.

En la inauguración de las jornadas ha participado también la alcaldesa de la ciudad, Elena Nevado, que ha incidido en la importancia de la educación en valores y la colaboración entre administraciones para prevenir y detectar estos casos de violencia entre jóvenes o hacia jóvenes.

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