La reconocida y consagrada actriz debuta en el Teatro Romano del Festival de Mérida con el personaje de Clitemnestra, en "La Orestíada", del 5 al 9 julio
05 July 2017
No es la primera vez que visita y trabaja en Extremadura pero si lo es su participación sobre la arena del Teatro romano. Ana Wagener se estrena en el Festival de Mérida y lo hace con ilusión. Conocedora de la responsabilidad que otorga un escenario de tal magnitud, la actriz se muestra emocionada con su personaje al que asegura haber prestado su fuerza y sensibilidad.
La veterana actriz apunta que ésta Orestíada de Jose Carlos Plaza sorprenderá al espectador, quién encontrará sobre el escenario un retrato del ser humano. Así, nos lo ha contado en una conversación con a Regiondigital.com.
Es su primera vez en el Festival de Mérida, su debut en el escenario del Teatro Romano. Actores de gran trayectoria como la suya relatan el vértigo que les produce. ¿Cómo afronta esta primera incursión?
La afronto con emoción y expectación, me siento como una cría que entra en un mundo que no conoce. Es algo muy bonito, porque un actor por muchos años de profesión que lleve siempre sigue estrenándose.
Además impresiona la energía que tiene este sitio, su magnitud e importancia. Es uno de los festivales más importantes y que coloca a Mérida en el mapa internacional y eso siempre impresiona. Más con una obra como “La Orestíada” y con un personaje como Clitemnestra para mí es muy importante. Hasta que no vea a la gente en las gradas y el teatro lleno no me lo voy a creer totalmente.
Espero que no me traicione todo ese volcán de emociones que tengo desde que he pisado este teatro. Aquí todo se ha colocado en su sitio y va tomando sentido, no estamos en nuestro local de ensayo sino en un escenario que acompaña en todos los aspectos nuestra gestualidad e interpretación. Un marco que envuelve y arropa a los actores, con una escenografía natural que deja volar la imaginación del actor.
En esta obra interpreta a Clitemnestra, un personaje duro y complejo. ¿Cómo se ha preparado para ello?
Pues, con mucho trabajo y confianza en José Carlos Plaza. Es la primera vez que trabajo con él pero me parece un sabio, un director que no deja coma sin estudiar. Me ha ayudado a desentrañar todo el texto, porque mi personaje es una mujer que dice y siente de manera desigual.
Un personaje que me costó mucho la forma, el fondo si se lo presté desde el primer momento. Soy una actriz muy emocional, me abrí en canal, he prestado todas mis emociones y los límites a los que puedo llegar. Y es que el personaje tiene un abanico muy importante durante toda la función, pasando por una montaña rusa de emociones.
Un personaje en el que me he arriesgado al máximo para darle fuerza, ya que se trata de una mujer temperamental, muy emocional. A Clitemnestra a veces el deseo de venganza le traiciona pero realmente el motor que tiene es un amor inmenso por algo que ha perdido, como es su hija.
¿Qué ha aportado Ana Wagener a este personaje clásico?
Sin duda el temperamento, la fuerza y la sensibilidad. Lo bueno que hay en esta función es que todos los personajes tratados por Luis García Monteros son comprensibles. Nada es blanco o negro, hay muchas tonalidades de grises y muchos matices en todos los personajes, incluso en las relaciones.
Es el caso de Electra y Clitemnestra cuya relación no es buena, pero todo tiene un por qué y un pasado en esta función. Todos los personajes tienen una carga de pasado impresionante. Además mi personaje es una mujer adelantada a su tiempo, es decir su perfil es reconocible en las mujeres de hoy.
¿Qué se encontrarán los espectadores que acudan a ver esta obra inaugural del Festival de Mérida?
Los espectadores se van a sorprender y emocionar. Lo que más nos importaba es que la gente comprendiese la historia. La función desde el minuto uno tiene algo muy especial, el texto tiene una esencia que va directamente al espectador hasta que lo atrapa. El espectador se va a encontrar un retrato del ser humano.
La Orestíada retrata el alma humana y la sociedad. La tercera parte de la obra, la relativa a la democracia, me parece una joya que refleja lo que sucede en nuestros días. Una justicia injusta o un pueblo que pide ser escuchado son algunos de los ejemplos que nos ofrece éste texto. Los actores hacemos con esta función un viaje apasionante que esperamos que llegue al espectador, de manera que logre viajar con nosotros.
Tras Mérida, ¿qué proyectos tiene entre manos?
Proyectos televisivos y cinematográficos. Estoy compaginándolos, por ejemplo estoy rodando la película “El Reino”, de Rodrigo Sorogoyen. Además en noviembre regreso, noticia que me ha emocionado, al Teatro Kamikaze en Madrid con el monólogo “La Voz Humana”.