Hervás contará con una de las apuestas más innovadoras en el sector de la bioeconomía

Hervás contará con una de las apuestas más innovadoras en el sector de la bioeconomía en Extremadura. Se trata de SUSTAINEXT, el proyecto que apuesta por el desarrollo sostenible, la generación de empleo y el impulso a la economía circular gracias a la fabricación de extractos botánicos.

La localización en Extremadura no es casual, es algo que se estudió desde que surgió la idea del proyecto para instalar esta nueva fábrica. En primer lugar, porque tiene una gran riqueza agroindustrial y un potente sector agroalimentario que está muy relacionado con su negocio.

De ahí que tenga sentido que trabajen en proximidad con el proyecto. Y también porque Extremadura está en pleno proceso de reindustrialización y tiene un claro enfoque hacia la economía verde y la economía circular, que son puntos relevantes para NATAC y para los proyectos europeos en los que trabajan.

Lo dice Alba Ramos, Project Manager de SUSTAINEXT, quien asegura que trabajarán con recursos locales, con agricultores de la región, que al final son sus proveedores de materia prima y es una zona muy rica y con mucha facilidad para tener ese tipo de relaciones con los otros actores de la cadena de valor. Además, también se crearán nuevas oportunidades económicas, por lo que el impacto puede ser muy positivo.

¿Y con qué materias primas se va a trabajar en concreto?

A.R.: Pues dentro del proyecto SUSTAINEXT trabajamos con dos tipos principales de materia prima. Una es biomasa agroindustrial y otra son plantas medicinales y aromáticas. En la parte de biomasa agroindustrial trabajamos con olivo, alcachofa y granada, mientras que en la parte de plantas medicinales trabajamos con romero, manzanilla y hierbaluisa.

Sin embargo, estas materias primas son un modelo de estudio dentro del proyecto, pero no nos limitamos a trabajar únicamente con estas. En nuestra fábrica la idea es trabajar con muchas otras y, de hecho, actualmente en nuestra planta de producción tenemos muchos otros tipos de materia prima con los que generamos productos.

Realmente, en el proyecto trabajamos en un nuevo modelo de producción en el que estas materias primas nos sirven como base, pero la idea luego es extender el modelo para otros tipos de materia prima y ampliar mucho las líneas de producción y el modelo de negocio.

Algunas de esas materias primas ya se cultivan en Extremadura pero desde SUSTAINEXT pretende escalar los modelos de cultivo que están estudiando en la región. Por ejemplo, están llevando a cabo algunos estudios con agricultores de tabaco, que ha tenido mucha importancia en Extremadura y están buscando alternativas a este cultivo que cada vez tiene más barreras sociales, económicas y de diferentes tipos.

La idea es cultivar plantas medicinales y aromáticas en tierras de tabaco para que luego estas plantas se incorporen en la cadena de valor y sean el producto de partida para producir extractos botánicos.

Según la directora del proyecto, también trabajan con otras empresas como Endesa, que tiene plantas solares y estudian modelos agrovoltaicos donde cultivan romero entre paneles solares, dándole una doble finalidad a este uso del suelo.

O con la Denominación de Origen Torta del Casar, que utiliza los cultivos de cardo, que es imprescindible para el cuajo de sus quesos, mientras que desde NATAC aprovechan todo el resto de la planta para generar también productos de alto valor.

SUSTAINEXT apuesta, según sus principios, por una bioeconomía circular, un modelo de negocio sostenible y desde NATAC se hace mucho hincapié en ese aspecto. ¿Cuáles son las principales acciones en este sentido y de qué manera se van a llevar a cabo?

A.R.: El proyecto SUSTAINEXT, que es un proyecto financiado por la Unión Europea, busca transformar nuestra fábrica en algo mucho más dinámico, sostenible y revolucionario en nuestro sector, por una manera diferente de fabricar, que es un poco lo que queremos transmitir.

SUSTAINEXT está dentro de una categoría de proyectos que se llama Flagship, o buques insignia, que lo que desarrolla son plantas demostrativas para toda la industria europea y demostrar que se puede trabajar de una manera diferente, servir como un ejemplo de buenas prácticas y casos de éxito en las estrategias de economía circular y transición verde.

En nuestro caso, estamos pasando de aquellos modelos tradicionales en los que, a partir de una materia prima, se fabricaba un único producto final, trabajando de manera estática y descartando todo el resto de biomasa, desechando todo lo sobrante.

También lo que hacemos es generar un modelo inteligente en el que nosotros decimos que hacemos una valoración en cascada. Esto quiere decir que sacamos el máximo valor posible a partir de estas materias primas, de estas plantas que usamos, generando una gran variedad de productos y, sobre todo, reduciendo al mínimo el residuo final que pueda quedar.

La planta final después de hacer todas estas fases de extracción y valorización es mínima, con lo cual reducimos mucho el impacto al medioambiente y, al mismo tiempo, estamos generando mayores productos de alto valor, con lo cual también estamos haciendo el proceso aún más rentable.

(Cuando Alba Ramos habla de productos de alto valor se refiere a ingredientes que al final son un extracto en polvo como lo que podríamos encontrar dentro de las cápsulas de complementos alimenticios, como puede ser valeriana o alcachofa, que compramos en la farmacia.

El Grupo NATAC cuenta en la actualidad con cerca de 200 trabajadores en las distintas sedes, incluidos Estados Unidos y Singapur donde pretenden ampliar su presencia en los mercados americanos y asiáticos.

El crecimiento de la empresa ha sido exponencial e incluso prevén ampliarlo más generando una gran diversidad de empleos directos e indirectos en Extremadura y en otras regiones).

¿El impacto del proyecto en la población de Hervás ha sido importante?

A.R.: Sí, ha sido un impacto muy significativo, porque, al final, estamos hablando de que Hervás es un pueblo pequeñito, tiene en torno a 4.000 habitantes, y que se establezca una planta de estas características tan innovadora y tan revolucionaria en el sector, creando esta cantidad de puestos, muchos de ellos son puestos cualificados, con lo cual también es un atractivo para que vengan profesionales a trabajar en la zona, repoblar un poco estas zonas rurales, y también un punto clave, especialmente en Extremadura, que es una región rural que, además, dentro de los objetivos de la Unión Europea, es una región de convergencia en la que se trabaja mucho en intentar asentar estas poblaciones rurales.

Aunque todavía es pronto para saber con cuántos trabajadores contará la fábrica de Hervás, que está en proceso de construcción, aparte del empleo directo que generará la propia fábrica, es importante destacar todo el empleo que se creará por las interacciones que NATAC tiene con otras compañías en la cadena de valor.

Por ejemplo, gracias a este proyecto, todos los agricultores que están pudiendo probar nuevas implementaciones de cultivos en la zona, a su vez están teniendo que contratar a gente para trabajar en el proyecto. Y esto, a su vez, genera un impacto indirecto en otras empresas con las que ellos trabajan.

ORIGEN DEL PROYECTO

Cabe destacar que el proyecto SUSTAINEXT comenzó en junio de 2023 y está previsto que culmine a finales de 2027. Aunque aún no hay fecha para la puesta en marcha de la fábrica, la idea es que esté operativa a finales del próximo verano.

De momento, este próximo miércoles, 5 de marzo, está previsto un evento de presentación de las instalaciones que supondrá el pistoletazo de salida a este proyecto que pretende ayudar a la innovación e industrialización de Extremadura generando un impacto social y económico que sirva de ejemplo a otras industrias.