Consejos de protección e hidratación facial

No solo se trata de una cuestión de verse bien, sino de sentirse también excepcional. La exposición prolongada al sol, las impurezas que se acumulan, e incluso los efectos del paso del tiempo y los excesos en el ritmo de vida, pueden afectar principalmente al rostro, a su piel y su vitalidad. Por eso, siempre es prudente realizar cuidados preventivos, así como correctivos o profundos, de manera que la piel siempre se vea lozana, fresca y atractiva, lo que influirá no solo en la salud, sino en el bienestar o la satisfacción personal.

La protección solar, una necesidad actual

Más de la mitad de los problemas de salud asociados con la piel del rostro tienen su origen en una incorrecta o insuficiente protección contra el sol y sus rayos UV. Y es que los rayos ultravioleta del sol son responsables no solo de enfermedades -incluyendo algunas como el cáncer de piel-, sino que pueden hacer que la piel envejezca más rápido, pierda elasticidad y se deshidrate.

Al respecto, cabe destacar que la crema solar Isdin Fusion Water puede ser una de las mejores decisiones que se puedan tomar. Utilizarla es tan sencillo como hacerlo con otros protectores solares, pero tiene la particularidad de que aparte de proteger, también hidrata, algo que sobre todo en época de verano es indispensable para que la piel siempre luzca fresca, pero por encima de todas las cosas, que esté debidamente protegida ante los potenciales riesgos y enfermedades asociadas con la exposición al sol.

La hidratación y la alimentación

Gran parte de los órganos del cuerpo -la piel incluida- están formados por un buen porcentaje de agua. Las temperaturas altas y una insuficiente hidratación diaria pueden hacer que se pierda salud, vitalidad, frescura y elasticidad en el rostro, por lo que hidratarse correctamente puede ser una de las soluciones más inteligentes y fáciles de implementar para mantener un rostro perfecto.

La hidratación, sin embargo, no siempre tiene que ser bebiendo agua, sino que la mejor manera de brindar hidratación a la piel es con cremas faciales específicamente diseñadas para ello, aún más si se trata de aceites esenciales o productos como la leche de coco o de almendras, cuyos efectos hidratantes son más directos y superiores al consumo de agua, que no por ello debe dejar de hacerse en forma y términos correctos.

Finalmente, está el tema de la alimentación. En lo que respecta a la salud de la piel, la alimentación es un tema que se debe cuidar, porque no todas las pieles funcionan de la misma manera o requieren los mismos recursos nutricionales. A pesar de ello, algunos alimentos o grupos de ellos, son recomendables en todos los casos, siendo los antioxidantes -especialmente los frutos rojos- y la vitamina C y E -donde los vegetales, cítricos y frutos secos están entre los primeros lugares de recomendación-, los que deberían formar parte de manera obligada de una dieta que persiga tener una piel lozana y siempre joven.

Aunque dependerá de cada caso, lo cierto es que muchas veces, mejorar o mantener la salud de la piel y específicamente la salud facial, es tan fácil como adoptar hábitos saludables -como usar un buen protector solar- o abandonar hábitos que sin duda perjudiquen la consecución de buenos resultados, como tomar insuficiente agua cada día o pasar largas jornadas al sol sin la debida hidratación posterior. 

A fin de cuentas, el rostro es la tarjeta de presentación de una persona, y lo mejor siempre será causar una buena impresión, tanto por el autoconcepto como por la salud, principal beneficiada de estos hábitos y recomendaciones.